LOS CLUBES AUTOMOVILÍSTICOS ANALIZAN LA SEGURIDAD DE 33 SILLITAS INFANTILES
Solo el 50% de las sillitas sometidas a examen han aprobado, según el último Informe de los Sistemas de Retención Infantil (SRI) realizado por los clubes automovilísticos europeos. Unas pruebas que se realizan anualmente y cuyo objetivo es dirigir al comprador hacia el producto más seguro.
Aunque la mitad de las sillitas infantiles han aprobado, solo dos han obtenido un sobresaliente, según los resultados de las pruebas realizadas para el Informe 2013 sobre la Seguridad de los Sistemas Infantiles de Retención (SRI), realizado por diferentes clubes automovilísticos europeos, entre ellos los españoles RACE y RACC. Además, algo más de la cuarta parte se ha quedado en un corto ‘aceptable’, y el 20% restante ha obtenido un contundente ‘suspenso’. En este informe se han analizado 33 modelos de sillitas infantiles de diferentes categorías y soportes. El estudio, en palabras de Antonio Lucas, coordinador de seguridad vial del RACE, “tiene como objetivo que los padres realicen esta compra tan importante con la máxima información posible y no recomendar las que han suspendido”. Para realizar este informe, las sillitas son sometidas a pruebas de choque frontal y también lateral. “Una prueba, esta última, que hacemos desde hace diez años y que no es obligatoria en la actual normativa europea de homologación de SRI”, señala Lluís Puerto, responsable técnico de la Fundación RACC.
La normativa se está revisando en estos momentos y entre los cambios más significativos está la introducción de una prueba de impacto lateral. Además, se eliminará la división por categorías (grupos) y será la altura del niño, y no el peso como hasta ahora, el que determine el SRI adecuado a cada menor. Asimismo, está previsto que las sillitas utilizadas por los niños de hasta 15 meses, solo se instalen en sentido contrario a la marcha. Esta obligatoriedad está apoyada por los citados clubes. Así, Lucas explica: “En este sentido, en caso de impacto, apenas se produce un movimiento entre la cabeza y el tronco, ya que el SRI sostiene todo el cuerpo del niño, reduciendo las consecuencias del accidente”. También están de acuerdo en que el cambio a una sillita colocada en el mismo sentido de la marcha ha de realizarse lo más tarde posible.
Pero Lluís Puerto matiza: “Cuando se habla de niños más mayores, a partir de un año, ya no lo vemos tan claro. Admitimos que cuanto más se alargue mejor, pero también vemos otros factores –niños que lloran, que reclaman a sus padres, que no ven a su madre...– y que podrían dar lugar a distracciones muy graves”. Se espera que la nueva normativa entre en vigor, en su primera fase, a lo largo del verano. En este sentido, Lucas aclara que “esta nueva normativa no implica ningún cambio para los padres que ya tienen sillita. Se podrán utilizar como hasta el momento”
Publicado en dgt.